Cuando una empresa detecta el uso no autorizado de su marca en el mercado argentino —especialmente si ya se están comercializando productos con signos idénticos o similares—, puede solicitar ante la justicia una medida cautelar para frenar inmediatamente el uso ilegítimo, incluso antes de iniciar una demanda ordinaria.
Estas medidas se otorgan con base en el artículo 50 del Acuerdo sobre los ADPIC (Ley 24.425) y el artículo 38 de la Ley de Marcas 22.362 y buscan evitar un daño irreparable o asegurar el cumplimiento de una futura sentencia.
La jurisprudencia argentina ha sostenido que este tipo de medidas son procedentes cuando:
-Verosimilitud del derecho invocado (titularidad marcaria valida y vigente)
-Existe peligro en la demora (los productos en infracción ya están en el mercado o por salir).
-Se ofrece una contracautela para compensar posibles daños causados al demandado.
Las contracautelas en casos de infracciones marcarias suelen fijarse en USD 1000 a USD 10.000 aproximadamente, reembolsables si la demanda prospera.
Cabe destacar que, dentro de los 10 días siguientes a la ejecución de la medida cautelar, se debe iniciar una demanda ordinaria para determinar si existió la infracción. Previo al inicio de esta demanda el proceso de mediación prejudicial es obligatoria.
Una medida cautelar en estos casos puede incluir:
-La suspensión inmediata de publicaciones online.
-La orden de cese en la venta o distribución de productos infractores.
-Embargos, secuestros y levantamiento de inventarios en locales físicos.
-Requerimientos de información sobre proveedores y compradores de los productos infractores, cantidad de unidades fabricadas o vendidas y su precio.
En casos de infracción de marcas, las empresas pueden considerar diversos remedios extrajudiciales antes de iniciar acciones legales. Entre ellos se encuentran el envío de cartas documento de intimación, la solicitud de bajas de publicaciones en plataformas digitales o el inicio de negociaciones.
Si bien estas estrategias suelen ser menos costosas, presentan limitaciones importantes. No obligan al infractor a cesar sus actividades, retirar productos del mercado ni revelar información comercial clave. Además, resulta difícil recuperar daños y costas legales a través de estas vías alternativas.
En comparación, las medidas preliminares son herramientas más ágiles y eficaces, por lo que resultan especialmente recomendables en casos complejos y de importante valor económico.
En Legal Core, asistimos a las empresas en el diseño y ejecución de estrategias que incluyen:
Investigaciones previas al litigio
Solicitudes de medidas cautelares urgentes
Representación legal integral en juicios por infracción de marca
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